viernes, 15 de mayo de 2009

Over the lines


Y el fotógrafo ha enseñado al puente a mirar,  por encima de las líneas, por encima de los raíles, y más allá, sobre el río, el Támesis, o el Liffey, el Nalón, y, por supuesto, profundo, profundo el ojo ha vislumbrado el ojo del Deva. El fotógrafo ha enseñado al tren mirar a través de las líneas del puente. El objetivo es circular, las líneas se alejan y se acercan, perspectivas que se juntan. Ha dibujado una línea, y ha escrito un fotograma. Ha revelado palabras, y las palabras también son líneas, si están bien construidas, si invitan a seguirlas, como las líneas del puente, de los puentes, del tren que pasa, y no se detiene, o sí, se ha parado en el disparador, un segundo de ilustración. El fotógrafo me ha enseñado, y este tiempo verbal, de líneas que unen pasado y presente, y dejan el futuro inmerso en este presente de puentes, me sigue enseñando. Cómo admiro al fotógrafo, que escribe aunque sea con un obturador, de la misma forma que firma un poema, o, tal vez, una novela, la Novela, del río que capta el objetivo de la cámara.