martes, 2 de junio de 2009

Vanitas, vanitatis

Pues sí, nos vamos a Madrid. Supongo que a veces es imposible no conjugar esa palabra de la tercera declinación -me pregunto si será vocativo, lo cual sería aún más grave, o será dativo o ablativo, que sería más llevadero entonces-; y está muy bien acordarse de las declinaciones, pero es necesario no cegarse por la memoria que resulta efímera si no se siguen trabajando las conjugaciones, y sin olvidarse del qui-quae-quod que nos hace pisar en la tierra, y sin parqué que valga, sobre tierra tierra, de la de sembrar patatas. 

vanitas           vanitates
vanitas           vanitates
vanitatem     vanitates
vanitatis      vanitatum
vanitati       vanitatibus
vanitate      vanitatibus

No hay comentarios: