Foto: Fernando Narciandi
La nieve limpia las ideas, les da brillo, las ilumina. Es el faro, uno, día y noche. Despertamos a la nieve, como despertamos a esta locura tan cuerda, tanto, que no saben ver los que acumulan basura en la sonrisa, los que no ven un haz de sinceridad, allá les iluminen cien mil faros, durante el largo día de las palabras repetidas, de los apretones de manos sin articulaciones que los moldeen. Nieva sobre Dublín. Las ideas brillan.
No hay comentarios:
Publicar un comentario